La Revolución Virtual está cambiando la forma en que hacemos muchas cosas, actividades del día a día como “ir a la compra” que ahora también podemos hacer desde casa. Combinando tecnología con un servicio que responde a las características de los clientes, muchos usuarios sustituyen las compras físicas por las compras online.
Son muchos los factores que pueden inclinar más hacia la compra online, desde la conveniencia, por la comodidad que supone si vives lejos de un supermercado, o en el caso de tener horarios incompatibles y, como no, la falta de tiempo para desplazarse físicamente.
Al comprar online estos factores se vuelven irrelevantes, de hecho, se puede seleccionar u na fecha de envío y, en la mayoría de las ocasiones, el intervalo de tiempo preferido.
¿Por qué comprar online?
Desde la comodidad que supone, ya que es una solución fácil y cómoda, sin salir de casa seleccionamos fácilmente lo que queremos, y en un plazo corto de tiempo, nos llega donde y cuando queramos olvidándonos de las largas colas.
Ahorramos tiempo, ya que la falta de tiempo es un tema de lo más habitual comprar desde el ordenador o el mismo móvil puede ahorrarnos mucho tiempo.
El formato de las páginas web permite navegar por el supermercado mucho más rápido. Por otra parte, los catálogos suelen estar muy bien organizados por categorías y subcategorías, lo que ayuda mucho a evaluar y comparar sin problema las diferentes alternativas.
Por otro lado, en todo momento de la compra online estamos al tanto de lo que estamos comprando. La plataforma virtual permite llevar un recuento de los productos que están ya en el carro, así como de la cantidad acumulada hasta el momento. También tenemos toda la información básica necesaria sobre el producto, incluyendo su precio y características principales.
En definitiva, que pocas excusas pueden quedarnos para no hacerlo, muchas veces el desconocimiento o la costumbre.
Ahora bien, como madre trabajadora y soltera la compra online se ha convertido en uno de mis grandes aliados para mejorar algo tan sencillo como organizarme mejor.
Además, el hecho de poder comprar desde casa me ha facilitado mucho el poder vivir en una urbanización con un montón de comodidades. Y es que el único inconveniente que encontraba era la falta de supermercados.
En cuanto una amiga me habló de lo fácil que le resultaba a ella comprar desde casa medio me convenció de que no tener supermercado cerca no iba a ser ningún problema.
Me habló de Tu Club de Compras, este supermercado online, donde ella encuentra todo lo que necesita y de todas las ventajas que le ha supuesto el cambio de empezar a comprar desde casa. En el caso de mi amiga, mejoró hasta la convivencia por el problema de decidir a quién le tocaba cada semana ir al supermercado, ahora la gestión era mucho más rápida y efectiva.
Está claro, que los supermercados físicos también tienen sus ventajas y muchos seguirán queriendo comprar en lugares físicos pero no me cabe duda de que las cosas están cambiando con la aparición de las Nuevas Tecnologías y desde que vi a una amiga comprar con su móvil me quedó claro que esto no es más que el principio.