Tanto si acabas de asumir la dirección de una pequeña o mediana empresa, como si llevas tiempo al mando de tu equipo, es normal que te preocupe que el ambiente en el trabajo sea el adecuado y que tus empleados estén contentos. De esto dependerán cuestiones tan relevantes como la productividad o la salud y el bienestar de todos los integrantes de la empresa. Según el informe de People at Work: una visión sobre el equipo global humano, un 67% de los trabajadores experimentan estrés al menos una vez a la semana; y el 53% cree que esto afecta a su rendimiento. ¿Quieres evitar que esto suceda? En este post de damos algunos tips para lograr un buen ambiente de trabajo.
No impongas un liderazgo autoritario y fomenta la comunicación
Hay jefes a los que les gusta imponer normas y opiniones de manera autoritaria y sin escuchar las necesidades, ideas y preocupaciones de sus empleados; a veces desde el desprecio y con superioridad. Esto es un gran error ya que hacen que su equipo se sienta desmotivado o extremadamente controlado. De esta manera, su compromiso con el trabajo disminuirá y es posible que los trabajadores quieran irse de la plantilla por voluntad propia o a base del mal desempeño de sus funciones para que les despidas. Si diriges una pequeña o mediana empresa y quieres tener un buen ambiente de trabajo, no te conviertas en una jefe al que los demás temen; no trates mal a los que están por debajo en la jerarquía ya que, además de ser personas con el mismo valor que tú, de ellos depende tu estabilidad. Recomendamos que construyas un ambiente comunicativo, escuches ideas y permitas tomar decisiones a tus empleados.
Facilita el crecimiento laboral de tus empleados
Si impones jornadas largas o periodos de trabajo intensivo a tus empleados, pero no les brindas oportunidades para que puedan crecer en la empresa, terminarán por aborrecer la actividad que están realizando y buscarán otras vías de crecimiento. Tu objetivo es retener a aquellos empleados más capacitados. Así reducirás la rotación de personal y también los costos que vienen con ella. Debes reconocer los logros de tus trabajadores personalmente y valorar el esfuerzo a través de las palabras. Si es necesario, a través de un extra en el sueldo, sobre todo en aquellos casos en los que la actividad realizada por tu empleado ha llevado a la empresa a incrementar considerablemente sus beneficios.
Promueve el trabajo en equipo
Si promueves el trabajo en equipo estarás transmitiendo a tus empleados la idea de que la colaboración y la comunicación son valores claves en tu empresa, y esto facilitará la unión a la hora de conseguir objetivos comunes, mejorando la productividad. Para lograrlo, puedes incentivar el aprendizaje conjunto facilitando oportunidades para que tus empleados asistan a talleres o cursos que, además, les permitan desarrollarse profesionalmente. En este punto también es muy importante que el lugar de trabajo sea cómodo y que tu equipo tenga espacio para hacer tareas en colectivo. Si en tu empresa hay demasiados tabiques o despachos separados, piensa en tirarlos para que el local se vea más espacioso y para facilitar la socialización de tus empleados.
Cuida la salud mental de tus trabajadores
La salud mental de tus trabajadores es fundamental para lograr un ambiente laboral eficiente. Tu empresa debe percibirse como un entorno seguro y tú, como jefe o jefa, debes mostrarte disponible a la hora de escuchar problemas o preocupaciones. Tienes que entender que todo el mundo tiene vida más allá de la empresa, y has de interesarte por las necesidades de cada persona. Si alguno de tus empleados está pasando por un momento difícil, permite, en la medida de lo posible, el descanso y asegúrate de que le muestras todo tu apoyo. Asimismo, intenta que ningún empleado esté sobrecargado de trabajo, y que las actividades que realiza para ti no le están consumiendo demasiado tiempo en su vida privada. Por último, deberás cuidar de que ningún integrante del grupo trate mal a los demás. No toleres actitudes de discriminación o burla.
Ten detalles con tus empleados más allá de la vida laboral
Al final de la semana pasamos muchas horas de vida en el trabajo y en compañía de nuestros compañeros y compañeras. Es normal que acabemos estableciendo vínculos que vayan más allá de la vida laboral. Es bueno que, si eres el jefe, también participes de las relaciones cotidianas y tengas detalles con tus trabajadores, sobre todo en fechas señaladas. Organiza tú mismo una cena en un buen restaurante o encarga detalles como cestas con comida y bebida. En la época navideña es muy frecuente comprar décimos de lotería conjunta.
Lo mejor es que puedes utilizar los servicios online para jugar a primitivas, bonolotos o euromillones sin salir de la oficina. Nosotros jugamos en diosa fortuna, ya que tienen un servicio online y ayudan a gestionar la compra de boletos de navidad y a confeccionar participaciones personalizadas. Puedes dejar a tus empleados que elijan ellos mismos el número al que vais a jugar. De esta manera, se creará una ilusión conjunta.
Ser el jefe o jefa de una empresa no es sencillo y es normal que cometas errores. No obstante, si cuentas con el apoyo de tus trabajadores, será mucho más fácil de gestionar. ¡Mucha suerte!
